lunes, 2 de abril de 2012

Tres días en el cielo

Hemos pasado un fin de semana fenomenal.

Comidas con buenos amigos y vuelta a lugares de origen. Que decir de la subida a la carrasca, la bajada a cruz y sierra, o la búsqueda de fósiles junto a la antigua casa de Benjamín.




O del paseo por Labuerda, degustación de jabalí en Salinas, conversación con Leonardo en la Comuna, o subida al castillo de Buil...




Esto llena el espíritu mucho más que el aburrimiento y agobio de la corte matritense. Mañana de nuevo a aspirar hondo, tomar aire, taparse la nariz y coger el AVE de vuelta.

Eso sí, la crisis sigue. Un asunto que no quiero dejar pasar al respecto es la memez sobre la necesidad de "que fluya el crédito", que oigo a todas horas. El capitalismo es la inversión del capital acumulado, ahorrado, no consumido. No la inversión de capital ficticio, capital fiduciario, apuntes contables del BCE sin ningún sentido económico detrás. Solo un sistema ya quebrado puede soportar la reserva fraccionaria con riesgo socializado.


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